Grabado
en vivo en el Carnegie Hall en octubre de 1964, este álbum presenta al legendario
saxofonista tenor Stan Getz en dos configuraciones diferentes: con su propio
cuarteto (con un joven Gary Burton en el vibráfono, Gene Chirico en el bajo y
Joe caza en la batería) los cuales imprimen las normas y su estílo pre-samba, y con su
cuarteto como acompañamiento a João Gilberto aunado al cachondo estilo vocal de
Astrud Gilberto.
Intercalado
entre estas dos presentaciones Getz es un íntimo acompañante más del trío de
João Gilberto, con Gilberto en la guitarra acompañados de Keter Betts en el
bajo y Helcio Melito en la batería.
Como
era de esperar, la música es suave y melódico,hipnotizante, y la presentación
general es ayudado por la calidad del sonido, que es en su mayor parte bastante
bueno, especialmente para un set en vivo, con su base de paradoja sonora de
íntimas voces (susurrando tan cerca del micrófono) enmarcados por
el sonido más distante de los instrumentos de fondo.
En
definitiva, este es un excelente conjunto musical y sonoramente perfecto